LECTIO DIVINA
Lectura del santo evangelio según san Mateo 5,13-16
Tomamos nuestra Biblia y leemos el texto (una o dos veces).
Qué dice el texto:
El Señor usa estos ejemplos fáciles de entender.
Sal: Tiene sabor, si no, no sirve para nada. Es algo que le viene de dentro. Desde fuera no se puede hacer nada. En la comida no se ve, pero se sabe cuando no está.
Luz: una vela que se enciende, no se debe esconder. Se enciende para iluminar, comenzando por los de la casa.
Tiene que ser visible, esa es su misión, su función.
Qué me dice el texto:
Yo voy a ser sal:
Si estoy unido a Jesucristo.
Si hago las cosas con amor.
Si fortalezco mi fe.
Si hago oración en la escucha de la Palabra de Dios; en definitiva, si soy verdadero discípulo de Cristo.
Hoy me pregunto: Soy sal con sabor? O estoy perdiendo el sabor?
Yo voy a ser luz:
Si no me avergüenzo de mi fe y la defiendo ante los demás.
Si hago las cosas en congruencia: no caigo en corrupción, en perder el tiempo, en aprovecharme de los demás, en ser justo con los demás.
Si ayudo en mi casa, a mi familia.
Si sé perdonar de corazón.
Si participo con fe y alegría en mi celebración eucarística.
Si soy un verdadero misionero ante mi prójimo.
Hoy me pregunto: Soy luz? Soy esa lámpara que se enciende pero se mete debajo de una olla?
Qué le digo al Señor?
Señor reconozco que no siempre me he dejado alimentar por ti y he bebido de otras aguas, te pido perdón porque he puesto en riesgo mi sabor, también a veces no he sido un verdadero testigo de tu amor, no he dado luz. Ayúdame a cambiar, quiero escucharte, sentirte en mi vida y quiero llevarte a mis hermanos. Sé que necesito la ayuda del Espíritu Santo. A Él me encomiendo para mi renovación. Gracias, Señor, por tu Palabra.
A qué me comprometo?
Buscar a una persona a la que le pueda hablar de Cristo, aunque me rechace. Así voy a ser luz.
Gracias Señor.